Losmedicamentos con financiación pública están sujetos a uncopago, del 40% de su precio, que abonan los trabajadoers activos y los que están en paro. Están exentos pensionistas y jubilados, sea cual sea su nivel de renta. La Generalitat no tiene competencias en ese punto. No puede alterar ese régimen de funcionamiento.
En varias ocasiones, elconsellerBoi Ruiz, y otras personas del Govern, se han pronunciado a favor de modificar esecopago, de forma que los trabajadores en paro no paguen el 40% del precio citado, y sí lo abonen los pensionistas de rentas altas. Es decir, que el copago se establezca en función del nivel de renta y situación laboral.
Aplicar un tíquet moderador de la demanda, o una tasa disuasoria del uso abusivo de los fármacos con financiación pública son dos expresiones que significan lo mismo. Se trataría de cobrar una cantidad, se supone que pequeña --de uno a cinco euros-- por cada receta expedida, no sobre el precio de lo recetado. Como ahora ya no se entregan recetas sino "planes terapéuticos" (programa semanal, mensual o trimestral sobre todo lo que ha de tomar un enfermo) ese tíquet podría cobrarse sobre toda la medicación de un periodo o sobre cada fármaco individualmente. La Conselleria de Salut desconoce si esto se podría aplicar unilateralmente desde Catalunya.