En la escuela como en su casa de Parets del Vallès, el gran animador de la Vuelta que acaba hoy en Madrid siempre ha convivido con las dos lenguas, de«forma fraternal y con normalidad».Así fue porque«muchos de mis amigos en el colegio eran castellanoparlantes y el castellano era y es, también, la lengua que hablamos en casa. Mi padre es de Madrid y mi madre de Jaén».
Desde los primeros años de escolarización,Puritocomenzó a convivir con ambas lenguas.«Tengo 32 años y recuerdo que en el colegio, a finales de la década de los 80, nos daban clase en ambos idiomas. En una escuela como la mía te dabas cuenta de que debías hablar en catalán a quien se dirigía a ti en esa lengua y en castellano a quien lo hacía en ese otro idioma. Allí fue donde aprendí a leer y escribir en catalán y donde comprendí que en el tema de la lengua jamás hay que radicalizar las posiciones ».