Un miembro de la Acampada Barcelona, Raul Navarro, ha leído un manifiesto para rechazar la violencia y ha reiterado que la actuación violenta de unos pocos no representa al movimiento. Ante los congregados en el Arc de Triomf de Barcelona, el joven ha insistido en que la acción violenta de unos cuantos no representa al conjunto, como los radicales no representan a toda una afición de un equipo de fútbol.
Mientras tanto, los indignados que habían abandonado los alrededores del parque de la Ciutadella y se habían concentrado en la plaza de Sant Jaume, en cumplimiento de la decisión adoptada en la asamblea, han abandonado la céntrica plaza y se han dirigido a la puerta del parque de la Ciutadella situada en el paseo Lluís Companys, tras pasar previamente por la concentración del Arc de Triomf.
Poco tiempo después, tras la salida sin incidentes de los diputados del Parlament, los indignados se han dispersado, si bien alrededor de 200 se han desplazado a la comisaría de Les Corts, ha donde han sido trasladados los seis jóvenes detenidos por los Mossos a lo largo de la jornada.
Los indignados han reivindicado que durante el día ha habido gente pacífica para frenar a los agresivos que se han agolpado en los accesos al Parlament, protagonizando algunos momentos de tensión. En el manifiesto, insisten en que la mayoría se ha comportado de forma pacífica frente a una minoría, a la que han atribuido los altercados, así como insultos y lanzamiento de agua y pintura, y ha definido el bloqueo como una "desobediencia activa no violenta, pacífica pero determinada".
El movimiento asegura que el "gran grueso de la gente ha practicado una estrategia de resistencia activa no violenta", y ha lamentado que más de 30 manifestantes han resultado heridos.
Cargas en la calle Wellington
Poco antes de la marcha hacia la plaza Sant Jaume, los Mossos han cargado contra el grupo de indignados que estaban en la calle de Wellington para intentar ganar espacio. Los policías han actuado sobre uno de los tres frentes en los que se dividían los indignados, consiguiendo que se levantaran del suelo y se retireran unos metros.
Los incidentes, según ha podido comprobar Efe, han ocurrido cuando los Mossos han querido abrir espacio para que salieran vehículos y han hecho una pequeña carga para abrirse paso en la calle de Wellington esquina con la de Villena, en una de las entradas laterales del zoo, situado también en el parque de la Ciutadella y muy cerca del Parlament.
Mientras, la policía ha ganado espacio para permitir que salieran una quincena de vehículos policiales y han avanzado el cordón policial, apartando a los manifestantes para crear un pasillo alrededor de las 16.00 horas, lo que ha generado momentos de tensión y algunos porrazos. Tras la salida de los vehículos, los indignados han retomado la posición inicial frente a un nuevo cordón policial que les impedía el paso, criticando a los Mossos por su violencia.
"Los violentos de siempre"
La mayoría de los indignados reunidos en asamblea desde las 14.30 horas en la confluencia de la calle de Pujades con Wellington han trasladado la manifestación, en un primer momento, a la plaza de Sant Jaume. Sobre las 20.30 horas han abandonado la plaza y han vuelto a la Ciutadella.
La asamblea, a la que han asistido unos 700 indignados, ha condenado masivamente las "acciones de los cuatro violentos de siempre". También reclama que los recortes sociales del Govern se voten en referendo.
La mayoría de indignados que han pedido la palabra han condenado enérgicamente "los actos de los cuatro violentos de siempre", como ha definido una joven asamblearia a aquellos que esta mañana han tirado piedras, pintura y bolsas de plástico contra Mossos, diputados y trabajadores del Parlament.
Contraproducente para el 15-M
La misma joven, después de recibir un aplauso clamoroso, ha alertado a sus compañeros del peligro que corren las simpatías populares que despertó el movimiento del 15-M. "Si la asamblea dice 'pacífico' tiene que ser 'pacífico", "No hay que atacar jamás", "No podemos exigir respeto y no respetar nosotros a otros trabajadores", ha dicho la chica en referencia a los Mossos.
"Nuestros enemigos son los banqueros y los políticos corruptos. Los Mossos no son nuestros enemigos. Respondamos con argumentos, no con violencia, y recuperemos el espíritu del 15-M", ha rematado.
Otro de los intervinientes en la asamblea ha insistido en que los llamamientos eran a bloquear el Parlament y que no se puede exagerar porque "cuatro compañeros hayan tirado alguna botella a los Mossos". Sus palabras también han sido aplaudidas, pero también han despertado murmullos y comentarios en contra entre el público.