El joven Sergio ha sido condenado hoy a cinco años de internamiento en un centro de menores y a tres años de libertad vigilada por el asesinato con alevosía y ensañamiento de la niña de 14 años María Dolores, Maores, el 1 de noviembre del 2008 en Ripollet (Vallès Occidental), la pena máxima para menores de 16 años.
Por su parte, el otro acusado, Luis ha sido condenado a cuatro años y nueve meses de internamiento y a tres años de libertad vigilada por cooperar en el crimen de la joven, que fue apaleada y degollada en un descampado.
El crimen de Maores, que conmocionó a la población de Ripollet por su brutalidad y la corta edad de los presuntos autores, ocurrió la noche del pasado 1 de noviembre en un descampado del barrio Can Mas de la población cercano a la casa de la víctima, donde los dos menores condenados habían pasado a recogerla.
La víctima, de 14 años, murió desangrada a consecuencia de una cuchillada en el cuello, aunque el cuerpo presentaba otras heridas de arma blanca y diversos golpes.
El juicio se ha celebrado en el Juzgado de Menores número 3 de Barcelona, en la recién estrenada Ciutat de la Justícia, a puerta cerrada para proteger la intimidad del entorno de la víctima y de los numerosos testigos menores de edad que acudieron a declarar, muchos de ellos compañeros de escuela de los condenados.