Salud y pobreza energética

Las subidas de la luz asfixian a los pacientes que viven conectados a una máquina

Unos 115.000 catalanes dependen sí o sí de la electricidad para seguir viviendo: sufren por ejemplo EPOC o apnea del sueño

Entidades y médicos denuncian que las facturas se triplican y que algunos enfermos abandonan el tratamiento

Un enfermo de EPOC que vive conectado a una máquina de oxígeno. / Jordi Cotrina

Los precios de la luz, disparados desde hace dos años especialmente en el mercado regulado, están asfixiando a los pacientes energético-dependientes: es decir, aquellos cuya subsistencia depende de estar conectados, ya sea más o menos tiempo, a una máquina. Son por ejemplo, enfermos con una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), con apneas del sueño o con diálisis, entre otras patologías. A algunas de estas personas se les ha triplicado la factura de la luz. Otras se han visto obligadas a abandonar su tratamiento ante el miedo de ser incapaces de afrontar los pagos a final de mes. En Catalunya, unas 115.000 personas dependen sí o sí de la electricidad para seguir viviendo.