EN NIÑOS

Salut eleva a 20 los brotes de impétigo en niños en las últimas semanas

En todo el 2018 han tenido lugar un total de 24, la mayoría de ellos (19) en escuelas

Es una infección bacteriana localizada en la piel que no reviste gravedad pero sí es muy contagiosa

Un bebé con impétigo.

La Conselleria de Salut ha elevado a 20 los brotes de impétigo en niños de entre 3 y 17 años de toda Catalunya desde finales de septiembre hasta este miércoles. Ayer había confirmado la existencia de 17, pero este miércoles por la tarde ha subido la cifra. Además, según la Xarxa de Vigilància Epidemiològica de Catalunya (XVEC), a lo largo de este 2018 han tenido lugar un total de 24 brotes de impétigo. La 'conselleria' recuerda que se considera brote cuando existen dos o más casos que coinciden en tiempo y espacio. Por tanto, en Catalunya, durante las últimas semanas, ha habido un mínimo de 40 casos de impétigo, sobre todo en escuelas. 

El impétigo es una infección bacteriana superficial y localizada en la piel. Es frecuente en niños de entre 2 y 5 años, especialmente en verano y a principios de otoño. No es grave, pero sí muy contagiosa. Sus lesiones son semejantes a las de una quemadura y se transmite directamente de persona a persona. Según Salut, 19 de los 24 brotes que han aparecido este año han tenido lugar en escuelas. Los otros se han registrado a nivel familiar (tres brotes), en un casal de verano (uno) y en una institución no saniatria (uno).

Además, la mayor parte de los brotes notificados este 2018 se han producido en Barcelona (17), aunque también han aparecido en otras zonas como el Vallès Oriental y el Vallès Occidental (dos brotes), el Barcelonès Nord y el Maresme (dos), el Barcelonès Sud (uno), en Girona (uno) y en las Terees de lÉbre (un brote).

La incidencia del impétigo aumenta en verano y a principios de otoño debido al calor y a la humedad. La infección se trata con antibióticos, ya sea por la vía oral o con una pomada. La XVEC recomienda, ante la sospecha de tener impétigo, consultar a un médico, extremar las medidas higiénicas (por ejemplo, no compartir toallas), tapar las lesiones que estén descubiertas hasta que no se haya formado costra y, en el caso de los niños infectados, no ir a la escuela hasta 48 horas después de haber iniciado el tratamiento.