Las abultadas listas de espera quirúrgicas y diagnósticas que acumula la sanidad pública catalana no mejorarán en la actual legislatura si el Govern no consigue aprobar unos presupuestos para el 2016, ha reitrado el 'conseller' de Salut Antoni Comín en la presentación de la secuencia de acción con que se podrían reducir parcialmente dichas demoras en caso de disponer de los 96 millones de euros prometidos en el plan de choque suscrito con la CUP, con el que se inició la legislatura. 

"Si el presupuesto del 2016 es una prorrogación del de 2015 -en los que no figuran los 96 millones del plan de choque-, las listas de espera no variarán, aunque nos comprometemos a que tampoco se incrementen", ha asegurado David Elvira, director del Servei Català de la Salut (CatSalut).

Esas demoras se traducían el 31 de diciembre pasado (último recuento) en 153.103 personas pendientes de una intervención quirúrgica, de las que 16.000 aguardan hace más de un año la cita para entrar en quirófano. De ellas, 1.112 son enfermos de cáncer, que "en el 100% de los casos" son intervenidos, afirma Comín, dentro del plazo de 61 días a que se comprometió el departamento de Salut en una orden publicada en junio del 2015.

Las intervenciones que acumulan a más personas en espera son la inserción de prótesis de rodilla (7.741 pacientes), de prótesis de cadera (2.207) y la resolución de cataratas (21.000).  

TIEMPOS A LA MITAD

La escasez presupuestaria se refleja asimismo de forma grave en las demoras para acceder a una prueba diagnóstica tecnológica. El pasado diciembre, 117.235 personas aguardaban una media de 91 días la colonoescopia, ecografía, resonancia magnética o ecocardiograma, entre otras, que permitiría a sus médicos diagnosticar la dolencia que sufren (este promedio no refleja las demoras de seis y siete meses que acumulan las determinaciones más solicitadas). Otras 657.000 personas esperan en la actualidad una media de 163 días para ser visitadas por un médico especialista en las consultas externas hospitalarias. Más del 50% de ellas, aguardarán más de un año, indica Salut. De ejecutarse el plan de choque, las demoras se reducirían a la mitad.

Si se aprobaran unos presupuestos, añade Comín, en julio del 2017 las listas de espera quirúrgicas se habrían reducido en 20.000 pacientes, y habría disminuido a la mitad el tiempo de demora para quienes aguardan una prueba diagnóstica. 

CONTRATARÁN A MÁS PROFESIONALES

La ejecución de esta reducción de esperas implicará "necesariamente", ha reiterado Comín, la incorporación de más médicos y enfermeras a los hospitales, o bien el pago de las horas extraordinarias de actividad que se solicitará a los que ya ejercen. Las hotras extra se dejaron de pagar, y de hacer, en el 2009.

Los centros sanitarios públicos de Catalunya han perdido en los últimos años más de 6.500 profesionales, la mayoría en los hospitales y centros de asistencia primaria (CAP) del Institut Català de la Salut (ICS). A esto se suma el hecho de que no se sustituyen las ausencias por vacaciones o enfermedad, lo que convierte en un imposible que el personal ahora contratado pudiera sumar más actividad de la que ya asume. Las traducción económica del incremento de profesionales, o del pago de horas extras, ya figura en el plan de choque, ha asegurado Elvira.