Las vacunas no son solo cosa de niños: ¿por qué hay que vacunarse en todas las etapas de la vida?

La vacunación infantil previene cada año el fallecimiento de cuatro millones de niños. Se estima que 50 millones de muertes se pueden prevenir mediante la inmunización entre 2021 y 2030.

Y es que, no hay duda de que las vacunas son una herramienta fundamental para prevenir algunas enfermedades infecciosas, como las respiratorias, que son la tercera causa de muerte en nuestro país. 

La inmunización materna es una estrategia que protege activamente a los más pequeños durante sus primeros meses de vida. 

Se trata de un mecanismo de protección para la madre y para el recién nacido. Sin embargo, tal y como ha explicado la doctora Carmen Pingarrón, jefa de servicio de Ginecología y Oncoginecología del Hospital Quirónsalud San José de Madrid, es una “herramienta infrautilizada pese a haberse demostrado la seguridad y eficacia”.

• “La integración de las prácticas de inmunización materna en las visitas rutinarias, sobre todo en atención prenatal, puede brindar una oportunidad para fortalecer y mejorar la confianza y el uso de la vacunación entre mujeres embarazadas”.

Una de esas vacunas que recomiendan los especialistas es la tosferina. Se puede prevenir mediante la vacunación. Las vacunas disponibles están combinadas con otras vacunas, de manera que se protege frente a tosferina, difteria y tétanos a la vez. Además, hay vacunas que protegen frente a cuatro, cinco y seis enfermedades.

La vacuna en las embarazadas protege a los recién nacidos

Se recomienda a las embarazadas vacunarse entre las semanas 27 y 36 de gestación (preferiblemente entre las semanas 28 y 32).  Y debe hacerse en cada nuevo embarazo, independientemente de cuando se haya recibido la última dosis de vacuna frente al tétanos y de sí se ha vacunado en un embarazo anterior.

La vacunación en los primeros años de vida

En el caso de las infecciones respiratorias, la inmunización en edad pediátrica no solo protege a los menores durante una etapa vital en la que son un grupo en pleno desarrollo, especialmente susceptible de contraer determinadas enfermedades graves, sino que ayuda a “cuidar” a otros colectivos vulnerables.

La pediatra María Garcés-Sánchez ha hecho hincapié, durante el VII Seminario Pfizer-ANIS, que la gripe es una infección respiratoria que también tiene un gran impacto en la población infantil.

• “La gente cree que la gripe es cosa de personas mayores, pero más del 40% se producen en niños, quienes también ingresan con cuadros graves”.

Por eso, no solo se recomienda la vacunación contra la gripe en los mayores. El aumento de la esperanza de vida en España conlleva un incremento de patologías crónicas. 

Como algunas vacunas infantiles pueden desaparecer con el tiempo, y el envejecimiento debilita el sistema inmunológico, la doctora Isabel Jimeno ha insistido “en la vacunación en la edad adulta para lograr un envejecimiento saludable”.

• “La presencia de estas patologías crónicas, junto con la edad, precisan tratamiento que afectan al sistema inmunitario, provoca que los pacientes sean más vulnerables a infecciones y las más frecuentes son las respiratorias”.

Desde Pfizer, quien ha organizado esta jornada junto a la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) a la que han asistido periodistas especializados en esta área, “trabajan para extender los beneficios de las vacunas para la prevención de enfermedades, con un enfoque especial en la investigación”, como ha resaltado Jorge Cháez, su director médico en las oficinas de España.