Opzelura: así es el nuevo tratamiento en formato crema para tratar el vitíligo

Todos pensábamos que Michael Jackson se realizaba tratamientos para aclarar su piel, pero en realidad lo que sufría el mítico cantante era vitíligo. Se trata de una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunitario ataca y destruye las células que producen la melanina (melanocitos) encargada de dar color a nuestra piel. Así, estas células mueren o dejan de funcionar. 

El resultado de esta agresión es la aparición de manchas blancas más o menos extensas en cualquier parte del cuerpo, aunque por lo general se localizan en la cara, manos y pies. 

Se trata de una enfermedad cutánea que puede afectar a cualquier persona, con independencia de su tono de piel. Pero los especialistas en dermatología dejan claro que no es una enfermedad grave y que, en ningún caso, se contagia. 

No causa dolor ni picor, pero lo que si supone en muchos casos es un gran impacto emocional en quienes lo padecen por una simple cuestión de estética.

La causa de que el sistema inmune ataque a los melanocitos no se conoce con exactitud, aunque los especialistas apuntan a que los factores genéticos y ambientales desempeñan un papel importante en su desarrollo. 

Lo que es cierto es que según los datos de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), entre el 1,5% y el 2% de la población padece vitíligo.

Tipos de vitíligo

En el año 2011 se estableció una clasificación del vitíligo en dos categorías. La primera categoría es el vitíligo no segmentario, el más frecuente, que puede aparecer en cualquier parte del cuerpo de forma dispersa. 

El segundo tipo es el denominado vitíligo segmentario que “afecta a zonas más concretas de nuestra piel siguiendo lo que se denominan “metámeras” que son zonas de distribución lineal”. Este tipo de vitíligo es más complicado de tratar.

Un nuevo tratamiento para repigmentar las zonas afectadas

Hasta hace poco tiempo los pacientes con vitíligo no disponían de muchas alternativas si querían tratar esta patología. Como explica la doctora Elena Tévar, jefa de la Unidad de Vitíligo del Servicio de Dermatología del Hospital Ruber Internacional y de Clínica Dermatológica Internacional (CDI), con los procedimientos de los que se disponía, como la terapia combinada de corticoides o inmunomoduladores, asociados a fototerapia, era importante el tiempo de evolución del vitíligo. 

• “Es decir, pacientes que tenían un vitíligo de reciente aparición, era relativamente sencillo repigmentarles según las localizaciones. Pero a pacientes que tienen vitíligo desde hace 10 o 15 años, era prácticamente imposible conseguir la repigmentación”, indica. 

Pero ahora el panorama para estos pacientes ha cambiado gracias a la aprobación de un nuevo fármaco, el ruxolitinib. Y es que hace poco la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) ha aprobado este fármaco para el tratamiento de la enfermedad. 

Presentada en forma de crema, la Opzelura, este medicamento pigmenta la piel en las zonas sin color y supone un gran avance para esta enfermedad. 

La forma de uso de esta crema es muy sencilla. La dermatóloga subraya que se aplica dos veces al día de manera continuada. “Los resultados mejoran significativamente la repigmentación de la piel facial y corporal, favoreciendo también la calidad de vida de los pacientes”.

• De hecho, los resultados del ensayo clínico, efectuado a 600 pacientes con vitíligo no segmentario, fueron muy buenos. Así, después de un tratamiento continuado de 52 semanas, la mitad de los casos consiguieron una mejoría de las áreas afectadas de ≥75%. Una excelente noticia para los más de 120 millones de pacientes que se estiman padece vitíligo en el mundo.

Además, esta crema repigmentante es segura, tal y como destaca la doctora Tévar. De hecho, el uso del ruxolitinib lleva aprobada en Estados Unidos más de tres años para la dermatitis atópica. 

• “Para el vitíligo lo único que puede producir en algunos pacientes es algo de irritación cutánea y alguna reacción, pero es un tratamiento que se tolera muy bien y puede utilizarse como máximo a la vez en un 10% de la superficie corporal”, explica la experta.