Hogueras (4): Sexto piso | Texto y podcast

En la televisión, una mujer muy seria y vestida de militar decía que no había razones para preocuparse

zentauroepp36063117 escalera200720184414 / JULIO CARBÓ

Subí por las escaleras corriendo en dirección al grito. Era un grito de hombre, dolorido y furioso, sonó durante unos segundos mientras corría escaleras arriba y después paró de golpe y yo corrí aún más rápido. En el quinto piso las puertas estaban cerradas; allí no podía haber sido, había sonado demasiado claro para haber salido de detrás de una puerta cerrada. Subí un piso más y nada. Comencé a pensar que quizá me lo había imaginado, pero encontré una puerta abierta en el sexto, daba al interior de un piso con un pasillo oscuro como el interior de una barriga. Me detuve para encender la luz de las escaleras, que se había vuelto a apagar. Un rectángulo de luz blanca entró en el recibidor, del interior del piso me llegaba un murmullo de voces y alguien quejándose. Ministro, que me había seguido, maulló en voz baja, como si a él tampoco le hiciera mucha gracia.