Dos años cerrada

Sant Adrià estudia imponer una multa millonaria por la contaminación en su playa cancerígena

Uno de los cables submarinos de fibra óptica durante las obras para extenderlo en la playa de Sant Adrià de Besòs.  / RICARD CUGAT

A finales de mayo hará dos años que el principal trecho de costa de Sant Adrià de Besòs está cerrado al público. Al margen de los intrusos que se obstinan en burlar el vallado para colarse, la playa del Litoral sigue siendo inaccesible en la ciudad de casi 37.000 habitantes, pegada a Barcelona. El litoral permanece cercado desde que se detectaron sustancias contaminantes potencialmente cancerígenas a nivel superficial en una proporción “inadmisible”, según el informe que precipitó la clausura en 2021. El municipio encadena la tercera temporada de baño consecutiva con la orilla blindada a la espera de que, retraso sobre retraso, se comience de una vez a descontaminar el tramo y se reabra antes de que el verano acabe. En paralelo, la localidad se propone ahora reclamar compensación por el estropicio.