Sector golpeado

El ocio clama contra el cierre de toda opción de diversión nocturna reglada

El recorte horario a las 0.30 horas incluso para las terrazas de los locales subleva al sector

La restauración pide al Govern poner el foco en los encuentros sociales fuera los circuitos regulados

Prueba piloto para el ocio nocturno en Sitges, el pasado junio. / Kike Rincon/Europa Press (europa press)

El ocio nocturno y, en menor medida, la restauración vuelven a estar en el saco de los grandes perjudicados por la pandemia. Con las cifras de contagio absolutamente disparadas en Catalunya, las restricciones anunciadas ayer por el Govern suponen el cierre de toda actividad de ocio nocturno reglada. Echa el cerrojo a la última opción que le quedaba al sector, tras las limitaciones vigentes desde el viernes, que en el caso de bares musicales, restaurantes musicales y discotecas significaba poder funcionar hasta las 2.30 horas o las 3.00 (estas últimas), más media hora para recoger, siempre y cuando tuvieran terraza y limitando el servicio a dicha zona. "Es un cierre encubierto, una medida de cara a la galería", arremeten ahora desde la patronal Fecasarm, dado que la mayoría de estos establecimientos bajarán la persiana.