Bienvenidos a la playa más histórica y septentrional de Menorca, un rincón inspirador – de nombre Viola de Ponent – que sigue custodiado por la mole pétrea del Cap de Cavallería y una de esas míticas atalayas de defensa. La gozaron los romanos, los moros y los británicos de antaño cuando fondeaban en el histórico puerto de Sanicera, conocido hoy día como Sanitja. Y prepárate, porque son tres: tres calitas de arena muy alejadas del mundo, pero a la vez fáciles de acceder. Y para después del baño –de sol y de ola– te propongo que te acerques al faro y te hagas unos selfies. Estos son lugares y experiencias que se han de recordar para siempre.
MIGUEL Á. ÁLVAREZ ALPERI