Dónde cumplir los propósitos de año nuevo en Barcelona

«Año nuevo, vida nueva», repites mientras te prometes que este año, sí que sí, harás un cambio radical en tu vida. Y no es por desanimar, pero la estadística juega en tu contra: ni un 10% de los españoles cumple los propósitos. Así que ni ir al gimnasio, ni dejar de fumar, ni comer más sano. Lo más probable es que termines el año igual que lo has empezado. Pero si estas dosis de pesimismo nietzscheano no te han amedrentado, en Barcelona hay muchísimas opciones para para llegar a Nochevieja con un 'check' en cada uno de tus propósitos. 1. «Tendré una vida más sana» Un gimnasio de videojuego Dijiste que empezarías la vida sana después de las Navidades. Pero, al igual que a Andrew Tate, las cajas de pizza en tu salón te han delatado. Parece que, para cumplir el propósito, hacer dieta queda descartado. Entonces ¿qué toca? ¿Ir al gimnasio? Basándote en experiencias pasadas, aguantar entre máquinas te cuesta más que a Neo de 'Matrix'. Pero eso es porque no conoces el gimnasio para vagos. O, más bien, «el gimnasio para demostrarte que no eres un vago», puntualiza Javier, CEO de Rockfit (Mèxic, 5), que, con una media de 5 estrellas en Google, se define como «el gym mejor valorado de Barcelona». La receta del éxito es sencilla, combatir desde la raíz el principal problema por el que no somos capaces de aguantar haciendo deporte: «El cansancio mental, porque, para muchos, el gimnasio es aburrido». Para resumir su trabajo, Rockfit es como un videojuego en la vida real. Imagínate estar dentro del Super Mario, lleno de plataformas, aumentando dificultades mientras subes de nivel. «Nadie empieza en el 'Candy Crush' por el nivel 165», cuenta Javier. Aquí, tampoco: «La gratificación es inmediata, y enseguida superas tus retos. Perfecto para seguir motivado», resume. 2. «No tendré ‘FOMO’» Los sitios que se llevan Sábado noche, estás en casa, tirado en el sofá, mirando 'stories' sin prestar demasiada atención. Y ves que, extrañamente, media 'timeline' está en el mismo evento. Como una conjunción de astros, donde tú estás más fuera que Plutón. Y ahí, el FOMO, el miedo a perderse planazos, pega fuerte. ¿La solución? Ten bajo el radar los 'hot spots' del momento. Fuera de los grandes clubes, ahora están de moda esas salas donde empieza la fiesta antes. Locales que a las 22 ya tienen ambientillo y que a las 3 están cerrando la persiana. Los nombres que más suenan ahora mismo, la Vol (Sancho de Ávila, 78), Meteoro (paseo de Montjuïc, 72) y Heliogàbal (Ramón y Cajal, 80). También están los restaurantes y bares que arrasan en TikTok. Como Belbo Dos Besos (rambla de Catalunya, 15) o Spicy (Comte Borrell, 41), famosos por sus neones. O los locales clandestinos, donde tendrás que cruzar puertas más escondidas que las misivas del Inspector Gadget, como Monk (Abaixadors, 10), al que se entra por un súper 24h, o Paradiso (Rera Palau, 4), escondido tras la puerta de la nevera de un bar de Pastrami. 3. «Seré más cultureta» Lo más ‘in’ en arte y cine ¿Te has descargado Letterboxd? Sí, la red social para cinéfilos que te cuenta las películas que has visto en un año. Cualquiera con perfil ahí ya lo sabe: hacer el seguimiento es adictivo, y un par de semanas usándola y acabas enganchado a las butacas del cine como Nicole Kidman en el anuncio de AMC. Si, encima, quieres rellenar tu dietario peliculero con filmes que se alejen de los blockbusters del momento, apunta las salas donde te encontrarás todo el moderneo barcelonés: el Zumzeig (Béjar, 53), los Cines Maldà (Pi, 5), la Filmoteca (Salvador Seguí, 1), el Phenomena (Sant Antoni Maria Claret, 168) o el vídeoclub Video Instan (Viladomat, 239). Otra forma de cumplir tu propósito es pasearte por las galerías más 'hot' de Barcelona. Por ejemplo, las Maxó, con cuatro sedes entre el Gòtic y el Born, donde conviven el grafiti, el arte moderno y decenas de eventos imperdibles. O el Palau Martorell (Ample, 11), un palacio del siglo XIX reconvertido en espacio expositivo que abrió sus puertas el mes pasado y que cuenta con una exquisita exposición dedicada a Sorolla. 4. «Estaré más zen» Rituales balsámicos Estás más nervioso que Froilán en el musical 'Cruz de navajas'. Y no, no eres el único. Los ritmos de vida que llevamos hacen que sea imposible desconectar. Tenemos el estrés a nivel chihuahua, y es normal que uno de los propósitos más repetidos sea aprender a estar zen. Muchos tiktokeros están apostando ahora por el método asiático: los rituales de té. Estas ceremonias sencillas, donde toda actividad consiste en tomar té, son un ritual balsámico que te obligan a poner pausa a tu vida. Aquí, mientras te van sirviendo vasito a vasito, no hay prisa, solo calma. Un par de recomendaciones: Interior de Té (Milton, 1) y Ritual Thai (Còrsega, 281). O el bienestar a base de 'ommmm', como el que ofrece el Dojo Zen Kannon (Gran Via de les Corts Catalanes, 665), un gimnasio donde la salud postural es tan importante como la emocional. A través de clases de yoga, meditación y 'mindfulness', llegarás al Nirvana. Otra forma de desconectar: apaga el ruido digital. Sí, ignora las notificaciones como si fueras Shakira con Hacienda. Silencio total. Este es el ingrediente principal de las terapias de (silencio), así escrito, con paréntesis. El local, situado en la calle Londres (41), combina la meditación, el ayurveda, la psicoterapia y la fisioterapia con este silencio sepulcral. 5. «Cuidaré a mi pareja» Mantén viva la llama La conciliación es la gran tendencia amorosa del 2023. Nada de 'workaholics'. El amor es el primer plato, se acabó mendigar por migajas de afecto. Así que toca dedicarle tiempo. Un plan para este fin de semana: subirte a la Torre Glòries y acurrucarte con tu pareja en los cojines escondidos por el laberinto que, hasta el 8 de enero, está habilitado en el mirador. Por primera vez, querrás subirte por las paredes con tu pareja. Otro plan de acurrucarse, el Winter Cinema en El Palace (Gran Via de les Corts Catalanes, 668). Un cinefórum por todo lo alto donde visten la espectacular terraza con cabañas, mantas, cojines, bolsas de agua caliente, palomitas, vino y chocolate caliente. O los conciertos más monumentales de la ciudad. Los de Candlelight, con música en vivo bajo la luz de las velas en escenarios icónicos de la talla de Santa Maria del Pi o el hospital de Sant Pau, y los conciertos gratuitos de órgano que la catedral celebra una vez al mes. Y si vuestra relación está más muerta que viva, usad la ouija para revivirla. Pasaos por Spirits Cocktails BCN (Súria, 6), la primera coctelería dedicada al espiritismo. Entre agua bendita, teles con neblina, cócteles con ojos, muñecas malditas y mesas con ouija, seguro que resucita la llama del amor. 6. «Veré más a mis amigos» Por un grupo más cohesionado Desde 2020, tu vida social ha ido disminuyendo a la misma velocidad que la intención de voto a Ciudadanos. Por eso, cuidar a los amigos está en tantas listas de propósitos. Como las actividades con una copa en la mano para crear vínculos irrompibles. Por ejemplo, en Arte Bar (Roger de Flor, 135), con clases de pintura acompañadas de vino. Sales de aquí con un cuadro bajo el brazo tanto si tu arte se acerca más al de Tàpies como al del 'Ecce Homo' de Borja. Si vuestro grupo es más de deporte que de cultura, saltad a la acción, literalmente, y pasaros por un club de salto. Por ejemplo, JumpYard (San Ferran, 4, Cornellà de Llobregat), que cuenta con la tirolina más larga de la Península: 100 metros de largo, 11 de altura y más de 20 segundos suspendido en el aire. Otro igual de popular, The Indoor Jumping Club (Perú, 230), equipado con colchonetas para todos los niveles y luces discotequeras. Traed muda de recambio, porque acabaréis sudados. 7. «Seré más sostenible» Antídotos para la ecoansiedad Greta Thunberg tenía razón en cuanto a la ecoansiedad. Y quien lo niegue, quedará peor que Elon Musk que, como lo definen los usuarios de su propia red social, «encarna todo lo peor del divorciado cincuentón». Por eso, este año toca pasarse a lo sostenible. Es fácil, y en solo tres pasos: uno, la ropa, de segunda mano. Dos, haz tus manualidades y no compres si no es estrictamente necesario. Por ejemplo, en Sunset Taller (Torrent de l’Olla, 87), Taller Balam (Ventura Gassol, 25) o Studio Kanay (Bruc, 5), para hacer desde cerámica hasta decoraciones para el hogar. Y, por último, coge el tren. Nada más sostenible, y es tendencia, según apuntan los expertos. ¿Dónde ir? Una propuesta tiktokera: pícnic romántico y sesión de juegos en los toboganes del parque de la Solidaritat de Esplugues de Llobregat. No te olvides de grabarlo todo, que quizá te sale un viral.

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