Conde del asalto

Vuelve Copito de Nieve

La idea parece que en breve llegará a pleno municipal: una posible escultura animatrónica del gorila albino

copito

Poco después de que Copito de Nieve falleciera, con la ciudad aún consternada, mi queridísima Julia Otero le preguntaba a Joan Clos sobre quién podría tomar «el relevo carismático» de un icono tan insustituible como el único gorila albino del mundo. El entonces alcalde, un tipo que siempre me ha generado una especie de ternura hija de la perplejidad por su talento para meter la pata en las ocasiones más solemnes, contestó: «Lo que se aprecia más es que tenemos diez gorilas en el Ayuntamiento de Barcelona».