Conde del asalto

No salgas de casa

El coche nos ha dejado tirados. Es curioso cómo una pequeña cosa puede detener el mundo y la vida. No sé a qué me recuerda

coche

El coche nos ha dejado tirados en el mirador de una montaña y yo como caramelos Ricola sabor Limón Melisa para matar el hambre. Es curioso cómo, en momentos así, no me cisco en nadie conocido ni en el Altísimo, sino en un matemático del siglo XVII. Ese que dijo algo que pienso justo ahora y que sirve como consejo para todo este año que acaba: “Todo lo malo nos sucede por no sabernos estar quietecitos en casa” (cito de memoria).