Es como volver a la niñez. El olor a churros, a patatas fritas, a chuchos... Ñammm. ¡Ahí está! Me bajo de la bici para fotografiar lo que para mí sigue siendo una maravilla. En un ladito de la plaza de les Glòries: la CHURRERÍA (Xurreria J. Alpuente). Y ahí están esos manjares de antaño que mantienen viva la tradición gastronómica de esta maravillosa tierra.
EN EL EIXAMPLE
Concretamente, en la confluencia de la calle de Ribes con la de Castillejos, muy cerca de los nuevos Encants.