Un cruce de caminos nada planificado, con cuatro calles y una bajada que se unen en una plaza de forma inexistente. Hay una muralla romana, una zona verde, una fuente y cuatro bares, y todo ello sin tráfico.Un lugar abierto en el barrio gótico donde entra el sol, y los vecinos se sientan en el poyo.
¡Y sin ningún hotel como testigo!
Ciutat Vella
La plaza dels Traginers, subiendo desde Correos, un enclave privilegiado del barri Gòtic.