EN FAMILIA

La ópera no es ningún tostón

'Opera for kids' pretende conectar a los niños con este arte a través de 14 arias inmortales tratadas con mucho humor

LA ÓPERA NO ES NINGÚN TOSTÓN_MEDIA_1 / JOSEP AZNAR

Los padres melómanos (como los muy aficionados a la lectura, al deporte o a la jardinería) querrían que sus hijos heredaran su pasión. No por hacerlos a su imagen y semejanza, que eso ya está superado, sino para que se beneficien del placer, la formación y hasta la compañía que proporcionan esos 'hobbies'. Es fácil que los niños disfruten escuchando música o bailando, pero... ¿qué música? He ahí la cuestión. No es cosa de hacerse el haraquiri si sorprendemos a nuestros churumbeles entonando (es un decir) eso de «Si te vas / yo también me voy...», pero seguro que nos hará más felices compartir con ellos el brindis de 'La Traviata', la furtiva lágrima de 'L'elisir d'amore' o el 'Nessun dorma', de 'Turandot', y de paso hablarles de VerdiDonizetti y Puccini, y que descubran qué es la ópera, qué voces hay en ella, qué es un aria...

Con esto en mente, el productor y director Edu Pericas ha concebido un espectáculo que, a partir de la historia de una niña que se duerme (y sueña) en la ópera, presenta al público 14 arias inmortales en su lengua original y muchos de los conceptos que se manejan en ese mundillo. Todo con un espíritu muy lúdico: el movimiento y el humor brillan tanto como las voces de los tres cantantes protagonistas (la soprano Anna Belén Gómez, el tenor Albert Gràcia y el bajo Ulises Ordúñez, acompañados por la actriz Gemma Martínez).

Opera for kids

Teatre BorràsGuion y dirección: Edu PericasReparto: Gemma Martínez, Anna Belén Gómez, Albert Gràcia, Ulises OrdúñezDías: domingos, 12 horasPrecio: desde 12 € 

Pensado para niños de entre 6 y 14 años, pero que también disfrutarán sus padres, 'Opera for kids', que se estrena en el Teatre Borràs el domingo 13 de noviembre y estará en cartel «mientras los niños quieran», tiene una duración de 70 minutos y, define Pericas, un objetivo claro: «Romper el tópico de que la ópera es un tostonazo».