El Gobierno, Aemet y la Confederación del Júcar fueron excluidos del Cecopi durante más de una hora

"Se apagaba la cámara y se cerraban los micros, así que era imposible saber lo que estaban debatiendo, o decidiendo, porque no lo compartían". Los asistentes de forma telemática a la reunión del Centro de Coordinación Operativa de Emergencias el 29 de octubre, representantes del Estado, quedaron excluidos de las deliberaciones en dos momentos de la tarde. El primero fue un simple receso de media hora nada más arrancar el gabinete de crisis. En el segundo, entre las 18 horas y las 19 horas, el debate ya estaba centrado en los mensajes de alerta que se barabaja enviar a la población. "Pero la pantalla se fue a negro" para los representantes de la Delegación del Gobierno, la Aemet y la Confederación del Júcar. 

Los tres quedaron al margen de esa discusión, según subrayaba el miércoles la ministra Teresa Ribera y confirmaban otras fuentes consultadas por Levante-EMV. Tras ese largo parón desde la sala del 112 se reactivó la señal para los que asistían por vía ‘online’, insisten. Ya se tenía claro que se iban a mandar mensajes de alerta a la ciudadanía. Uno, el primero que se barajó, se refería a los municipios ribereños de los ríos Magre y Xúquer por la suelta de caudales de la presa de Forata, que ya no podía asumir más agua y se iba a proceder a desembalsar a razón de 1.000 m³/s. La opción era evacuar a algunas localidades más expuestas de la Ribera por donde transcurre el cauce, hasta su desembocadura en Cullera, ya que la incertidumbre sobre la estabilidad de la infraestructura hidráulica era grande.

Según ha podido saber Levante-EMV, la alternativa de la evacuación se desechó por el riesgo que podía comportar. En concreto, fue el jefe de la emergencia, el inspector jefe del cuerpo provincial de bomberos, José Miguel Basset, el que descartó esta medida. Las fuentes consultadas de la reunión apuntan que este primer mensaje que se barajó pretendía recomendar a la población de los municipios más cercanos a la presa de Forata moverse hacia las partes más altas de las poblaciones. Sin embargo, el temor a que un inminente colapso de la presa se produjese (esa era la información que manejaba la CHJ), hizo descartar una alternativa que podría coger a la población en las calles en plena evacuación.

Finalmente, fue otro mensaje del sistema EsAlert, con un contenido distinto, el que se dirigió a toda la provincia como una llamada de precaución generalizada. Sin hacer referencias a ningún barranco ni a ninguna zona en concreto. Lo cierto es que aún pasaría una hora y cuarto más, hasta que a las 20:12 empezó a sonar un pitido en los móviles con una alerta: "Por las fuertes lluvias y como medida preventiva se debe evitar cualquier tipo de desplazamiento en la provincia de Valencia". A las 20:57 de la noche un nuevo sonido recomendaba "permanecer en casa". "En viviendas y zonas próximas a ríos, cauces, barrancos o ramblas permanezcan alejados y en zonas elevadas", continuaba.

En cualquier caso, Ribera dejó muy claro en su comparecencia en el Congreso que las tres personas que representaban a la Delegación del Gobierno, a la Agencia de Meteorología y al organismo de cuenca, "no pudieron participar en ese debate que seguro estaba teniendo lugar de manera presencial en la sede del Cecopi para decidir cuál era la mejor manera de responder a los avisos, a la información de la que se disponía". Sobre si se les avisó de que se suspendía la reunión y si se les explicó el motivo, Ribera espetó: "Lo mejor es que se lo pregunten a la delegada del Gobierno (Pilar Bernabé)".

Durante su comparecencia, Ribera recordó no sin acritud que la reunión del Cecopi "no se convocó hasta dos horas después de estar elevado el nivel de alerta", criticando los "errores en la interpretación" con respecto a las competencias, y recordando que los niveles 1 y 2 de alerta son de competencia autonómica. "No es la delegada del Gobierno la que está al frente de la emergencia", incidía. La ministra, también acudió por la tarde al Senado, defendió la gestión de la DANA en lo que afecta a las competencias del Gobierno central, asegurando que se emitieron "las alertas adecuadas" y que los organismos estatales y del Ministerio para la Transición Ecológica estuvieron "activos".

La Generalitat niega el 'apagón'

Frente a las manifestaciones de la ministra Ribera, la Conselleria de Justicia e Interior afirmó que comenzó a las 17:00 horas y no se canceló en ningún momento durante toda la tarde y noche de esa jornada. "Es falso que la reunión se cancelara en estos términos", señalaron. Estas mismas fuentes sostienen que únicamente hubo un breve receso. Es más, durante el receso la conexión por videoconferencia nunca se cortó, se mantuvo abierta en todo momento. La conselleria recuerda que entre las 18 y las 19 horas del 29 de octubre en el Cecopi "se analizó el escenario de la presa de Forata y la situación de Utiel".