Máxima preocupación en el Gobierno central sobre la situación en el Sahel y las consecuencias de la inestabilidad en esa zona de África tanto respecto a la presión migratoria sobre Canarias, como por el asentamiento en esos países de grupos yihadistas. La alerta que el Departamento de Seguridad Nacional (DAN) acaba de expresar en su reciente informe anual sobre Análisis de Riesgo, considerando la llegada de migrantes a España y, especialmente a Canarias, entre las principales amenazas para la seguridad nacional, la confirmó este miércoles de manera más o menos implícita el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su comparecencia en el Congreso para hablar del último Consejo Europeo y de las relaciones con Marruecos. Para ilustrar el entorno geopolítico en el que está inmersa la UE, Sánchez se refirió a una “vecindad cada vez más inestable y conflictiva” y señaló el norte de África, junto a la guerra en Ucrania y el conflicto entre Israel y Hamas en Oriente Próximo, como uno de los asuntos de mayor preocupación y que ponen en jaque la seguridad de la Europa comunitaria y de España y que obligarán a un mayor gasto militar.