Análisis

Tigres de papel contra la ley de amnistía, por Ernesto Ekaizer

El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón. / Xavier Amado

Profecía autocumplida. Me hubiera gustado -confieso- que alguien citase estos días una frase de mi libro 'Operación Jaque Mate'. “Manuel García-Castellón, con formación de cultura francesa, tenía para sí aquello que escribió Balzac en su novela 'Esplendores y miserias de las cortesanas': "Ningún poder humano, ni el Rey, ni el ministro de Justicia, ni el primer ministro pueden usurpar el poder de un juez de instrucción, nada lo detiene, nada lo manda…". Una construcción verbal basada en la célebre frase atribuida al emperador Napoleón Bonaparte al crear la figura del juez de instrucción a través del artículo 55 de la ley de 17 de noviembre de 1808 del Código de Instrucción Criminal. El juez de instrucción, el hombre más poderoso de Francia".