La posibilidad de que la ANC presente una cuarta lista independentista a las próximas elecciones catalanas lleva tiempo tensionando las costuras de la entidad. Justo hace un año, la propuesta que abandera la actual presidenta, Dolors Feliu, ya provocó una fuerte crisis interna que terminó con la dimisión de hasta 13 secretarios nacionales y la salida de su entonces vicepresidente. Pero ahora, con la consulta a los socios sobre la creación de esta lista electoral a la vuelta de la esquina -se celebrará entre el 1 y el 14 de marzo- han salido nuevas voces críticas con este impulso a la arena de la política institucional. En diciembre ya se pronunció en contra la territorial de la ANC de Girona y ahora lo han hecho un centenar de cargos territoriales y exsecretarios nacionales de la entidad, que han empezado una campaña para buscar el voto contrario en la consulta.

Entre los firmantes del manifiesto destacan nombres como el de los exvicepresidentes Jordi Pesarrodona, Josep Cruanyes, Jaume Marfany y Carles Castellanos; así como también el de socios destacados de la entidad como el cantante y exdiputado Lluís Llach o el del exsecretario general de la Intersindical, Carles Sastre. "Estamos en contra de esta lista cívica, esto no quiere decir que no queramos una lista de otra manera", han querido dejar claro los impulsores del texto en declaraciones a la prensa a las puertas de la sede de la entidad, donde pretendían celebrar una rueda de prensa, que la dirección les ha impedido. Una actitud que tachan de "sectaria" y contraria a los valores "democráticos" del movimiento, y que desde la actual dirección justifican con que la infraestructura solo se puede usar a petición del secretariado.

Además de las críticas públicas y de la petición de votar 'no' en la consulta interna, el centenar de críticos también ha registrado una denuncia ante el Comité Deontológico de la entidad, en el que acusan a la dirección de incumplir los estatutos, el código ético y la actual hoja de ruta, al romper con el principio de la entidad de no presentarse a las elecciones. Con todo, este sector ha tachado el actual proyecto de lista de "delirio de formas abstractas", considera que "difícilmente será exitoso" y, además, cree que es "altamente divisivo" y que amenaza la "unidad" del movimiento independentista. Próximamente, los críticos también podrán en marcha una página web para recabar más apoyos.