45 aniversario de la Carta Magna

El choque político y el miedo a un referéndum alejan una reforma de la Constitución

Una imagen de la fachada del Congreso. / EP

Vamos a hacer un experimento. Imagínese que eligiéramos a un diputado de cada formación y lo metiéramos en una habitación. Entre las cuatro paredes solo habría una mesa y, sobre ella, un melón. Cada uno actuaría de forma distinta. Hay quien no lo tocaría, otros que lo abrirían a la mitad y aquellos que se plantearían si pueden convertir ese melón en otra cosa. Perdonen el símil, pero esto es lo que ocurre cada vez que los partidos se encuentran de frente con la Constitución. La comparación entre un melón y la Carta Magna, por cierto, la hacen los políticos cuándo se les pregunta por qué en 45 años de democracia solo se ha modificado dos veces.