Coalición Canaria ya no hace de la amnistía una 'línea roja' para apoyar a Sánchez

La amnistía que el PSOE ha negociado con Junts y ERC para los independentistas implicados en el referéndum ilegal de hace cinco años en Cataluña ya no es una “línea roja” para un posible apoyo de CC a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno central. Los nacionalistas canarios siguen sin aclarar su posición final respecto a la reelección del líder socialista, y mantienen un lenguaje muy ambiguo sobre los términos en que se produciría una negociación al respecto, pero desde hace algunas semanas han modulado el mensaje y ahora vuelven a poner el énfasis en la “agenda canaria” que pretender cerrar con los socialistas. Aunque el líder de Coalición Canaria, Fernando Clavijo, aseguró el martes, tras entrevistarse con la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, que la amnistía seguía siendo una “línea roja” para su formación, lo expresó de tal manera que daba a entender que se refería a la propia medida de gracia y a la propuesta legislativa que a esos efectos el PSOE estaba a punto de cerrar con los partidos soberanistas catalanes. No, por tanto, como elemento clave en la decisión última de CC respecto a la investidura. Fuentes nacionalistas confirmaban este jueves que la declaración de Clavijo había que interpretarla en ese sentido, asegurando que “si llegáramos a un acuerdo para el ‘sí’ a la investidura de Sánchez, no sería extensible a la proposición de ley sobre amnistía” que se está negociando para su registro en el Congreso de manera inminente. Esto no quiere decir en absoluto, según las fuentes de CC consultadas, que se está en estos momentos más cerca del apoyo a Sánchez que de la abstención, pero es un paso crucial en las filas nacionalistas en este proceso de negociación. La abstención era el máximo que CC estaba dispuesta a conceder al PSOE si la investidura contemplaba ese acuerdo previo con Junts y ERC para obtener sus votos a cambio de la medida de gracia para los encausados en el ‘procés’ catalán. Así se lo advirtió la diputada de CC en el Congreso, Cristina Valido, al propio Sánchez en la reunión mantenida por ambos el pasado 11 de octubre, en la que avanzó que cualquier negociación entre la formación isleña y el PSOE se condicionaría a un pago previo por parte del Estado de todas las partidas comprometidas con Canarias en los presupuestos estatales en vigor. Esa ‘deuda’ se saldó aparentemente en la mencionada reunión del martes entre Clavijo y Montero, abriendo paso a una negociación sobre la agenda canaria defendida por CC y que ya había sido aceptada por el PP para el apoyo de Valido a la frustrada investidura del candidato y líder popular, Alberto Núñez Feijóo. Clavijo destacó entonces que “si se dan las circunstancias de poder hablar de investidura o de acuerdos de legislatura nosotros siempre hemos dicho que estamos abiertos, y este ha sido un buen paso”, insistiendo en varias ocasiones en que la “agenda canaria” siempre ha sido la “prioridad histórica” para CC en sus posicionamientos y estrategias en Madrid, y que lo seguía siendo ahora, recordando además el apoyo que ya le brindó al líder socialista en el primero de sus intentos de investidura, en marzo de 2016. En todo caso, las cosas siguen en estos momentos situadas en el mismo sitio que el martes pasado, es decir, que el Gobierno de Canarias sigue analizando y verificando si se están efectuando las transferencias comprometidas y cerrando con el Ministerio de Hacienda los términos en que se iba a producir el traspaso de la cantidad más importante de las pendientes, los 100 millones para la reconstrucción de La Palma, bien a través de convenios entre el Gobierno central con los municipios afectados y con el cabildo insular, bien a través del Ejecutivo regional. Hasta que eso no quede cerrado del todo, la negociación para la investidura no se abrirá, aseguran en CC, sin que haya nuevos contactos políticos del PSOE con Valido para negociar su voto. CC quiere tener la garantía de que el texto pactado entre el PSOE, Junts y ERC pueda ser avalado como constitucional Cabe señalar, sin embargo, que, pese a que apenas queda una semana para la investidura, según los plazos que contempla el PSOE, la negociación con los nacionalistas no requeriría de mucho tiempo dado que se asume prácticamente al completo el documento que se ha puesto sobre la mesa por parte nacionalista, además de otros asuntos de última hora relacionados con la gestión de la crisis migratoria en las Islas. El elemento central de la negociación para los socialistas sería precisamente asegurar el ‘sí’ de Valido a la investidura, no solamente la abstención, que se aceptaría en todo caso como un primer paso para futuros acuerdos a lo largo de la legislatura, pero con un precio distinto al del apoyo explícito. CC ha descartado en todo caso el voto en contra independientemente del resultado de esa negociación con el PSOE, y mide ahora los pasos para poder justificar el apoyo a Sánchez si la contrapartida es una agenda canaria al completo que implicaría todo un programa de gobierno para con las Islas por parte del nuevo Ejecutivo de Sánchez a lo largo de la legislatura, y que podría contemplar además unos compromisos presupuestarios para el año próximo a cambio del apoyo de CC también a las primeras cuentas estatales de la nueva etapa política. En este marco, el debate interno en la formación nacionalista sobre la amnistía queda un poco condicionado al resultado de las negociaciones y seguramente también al contenido de la ley que la ampare. CC quiere tener la garantía de que el texto pactado entre el PSOE, Junts y ERC pueda ser avalado como constitucional más allá de las diversas lecturas jurídicas que se hagan del mismo. Una ley que desde la formación canaria se considerara claramente al margen de la Carta Magna dificultaría ese apoyo explícito a Sánchez que piden los socialistas. Clavijo y los suyos se decantarían entonces definitivamente por la abstención. Pero una amnistía que soslayara una clara inconstitucionalidad desactivaría la “línea roja” de la que habló en un principio la formación isleña para el ‘sí’ a la investidura, aunque el voto de Valido a esa ley será sin lugar a dudas en contra.

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El veto de los nacionalistas a la medida de gracia para los independentistas catalanes es para la ley, pero no para la investidura

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