Ante el 28-M

Sánchez da por cerrada la crisis del ‘solo sí es sí’ y se vuelca en el combate ideológico con el PP

“Hoy se cierra un ciclo. Ha sido muy duro, pero no podíamos dejar la ley como estaba", señala un miembro del Gobierno

Pedro Sánchez, el miércoles en el Congreso. / David Castro

Una sensación de alivio recorrió este jueves la bancada socialista del Congreso de los Diputados cuando fue aprobada la reforma de la ley del ‘solo sí es sí’. El éxito de la propuesta, que vuelve a elevar las penas tras las más de 1.000 rebajas y 100 excarcelaciones de abusadores sexuales que ha provocado la norma desde que entró en vigor a comienzos de septiembre, nunca había estado en cuestión. Pese a las críticas, el PP dejó claro casi desde el primer momento que la apoyaría. El alivio del PSOE obedecía a algo distinto: el presunto fin del mal trago en torno a esta ley, que ha provocado el enfrentamiento público más grave con Unidas Podemos dentro de la coalición, con los morados votando en contra de una iniciativa que modifica el proyecto estrella del Ministerio de Igualdad, dirigido por Irene Montero, y acusando al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de liderar una “involución” en el derecho de las mujeres al sacar del foco, según su versión, el consentimiento de la víctima en este tipo de delitos.