Votar contra el propio interés

Lo que queda de la perversa moción de censura de Vox-Tamames

El debate apunta a la convergencia de Yolanda Díaz con Pedro Sánchez , con el Gobierno de coalición y con los ministros más relevantes

Gabriel Rufián, durante su intervención durante la moción de censura presentada por Vox. / EFE / Kiko Huesca

Un fantasma recorre la política española. Se llama 'Yolanda Sánchez'. El martes 21 de marzo, una de las presentadoras del de TVE, sobre las cuatro de la tarde resumía los argumentos contra la moción de censura de Vox de quien llamó, en un lapsus, la vicepresidenta 'Yolanda Sánchez'. Este miércoles 22, la portavoz del Partido Popular, Cuca Gamarra, protagonista de la guerra cainita dentro del PP entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso -lo que no le impidió atacar del cainismo dentro del Gobierno-bautizó a Yolanda Díaz como la “marca blanca” de Pedro Sánchez. No diremos que un sudor frío recorre a las huestes de Alberto Nuñez Feijóo, no. Pero su futuro electoral depende de “Yolanda Sánchez”, esto es: la alianza entre Yolanda y Sánchez, entre el PSOE y Sumar-Unidas Podemos.