Crisis total en el PP

Feijóo, presionado en el partido y por los empresarios para que dé la batalla

La alianza del presidente de la Xunta y Ayuso acorrala a un Casado que se resiste a dimitir

Pablo Casado, este lunes a las 23.50 horas, en su despacho de la sede de Génova. / José Luis Roca

Pablo Casado ha querido ganar una semana. El líder del PP cree que tiene derecho a intentar aguantar las presiones de barones destacados de su partido, y también de algunos medios de comunicación, y este lunes rechazó dar un paso atrás. Casado estuvo reunido durante siete horas con el comité de dirección, un núcleo duro de una docena de personas, y acordaron que la semana próxima se celebrará una junta directiva nacional de la que saldrá “una fecha para el congreso”. El ordinario tocaría en julio. El extraordinario, que Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso esperan que se celebre cuanto antes, podría hacerse, según los estatutos, en mes y medio.