Pere Aragonès quiere dar relevancia al primer aniversario de las últimas elecciones autonómicas, las del 14 de febrero, que, al fin y a la postre, le catapultaron a la presidencia de la Generalitat. Y para ello ha citado a lo más granado de la sociedad catalana a una conferencia en la Sala Oval del MNAC, este lunes. Los 300 invitados, entre los que se cuentan los representantes de todos los partidos parlamentarios, excepto Vox, no asistirán a un balance del primer año de su Govern, por cuanto la investidura se produjo el 21 de mayo, sino que dirigirá sus tiros a los principales retos a encarar. Y subrayará la importancia de la defensa social, vía, por ejemplo, la movilización, de los grandes consensos 'de país' que, como la lengua y, incluso, el fin de la represión y el derecho a la autodeterminación, trascienden del ámbito meramente independentista.