Enmienda a la totalidad de la CUP al Govern de Pere Aragonès al que facilitó la investidura pero que a tenor del discurso de Carles Riera, parece no estar dispuesta a apoyar en ningún ámbito. Riera ha acusado al nuevo Govern de practicar la "sociovergencia", de incumplir el prometido giro a la izquierda y de estar empecinado en negociar con un Gobierno que no quiere dialogar, según el diputado cupaire, que ha comparado a Aragonès con Pujol por estar "confundiendo al país con el partido". Y ha calificado la mesa de diálogo de "desastre" y "fracaso absoluto" por lo que ha reclamado "poner fecha" a la propuesta estrella de la CUP: un nuevo referéndum.
En un discurso en el que ha llegado a plantear una Catalunya socialista donde estén en manos públicas "las infraestructuras, la energía, la digitalización, el territorio de la vivienda, el territorio y la vivienda y los medios de producción de bienes necesarios para la vida”, Riera ha echado en falta el giro hacia la autodeterminación y la izquierda por parte del nuevo Ejecutivo. "Ustedes están muy lejos de estos compromisos"; ha afeado el parlamentario, que ha acusado a Aragonès de incumplir acuerdos de investidura como la moratoria de macro proyectos de energías renovables, la desprivatización de educación y sanidad, la gestión municipal del agua y la consulta sobre los juegos olímpicos de invierno antes de impulsar la candidatura, o la preparación de un nuevo "embate democrático" con el Estado en la cuestión soberanista.
Por ello ha advertido al Govern que o bien da un giro "de 180 grados" en sus actuales prioridades y en la política fiscal o no podrá conar con los cupaires para los presupuestos del 2022. Todo ello en un discurso sin ningún punto de encuentro, en el que Riera ha acusado a Aragonès de usar "el Govern no al servicio del país sino de su agenda bilateral con el PSOE", y de "ceder a la represión y las amenazas" y pretender la "desactivación del conflicto".
"Súmense al referéndum"
Riera ha reivindicado la celebración de un nuevo referéndum, que tanto ERC como Junts rechazan explícitamente, para acceder a la independencia, y ha pedido a Aragonès que le ponga fecha y prepare "las condiciones de movilización, lucha, conflicto desde la calle".