Contracrónica de un debate sin chispa

Borràs contraprograma a Aragonès

¿Ha acusado la presidenta del Parlament al 'president' de estar a un paso de crear la Generalitat de Vichy?

Laura Borràs acompaña a Quim Torra a su despacho para que, en presencia de Pere Aragonès, sea objeto de un homenaje en el aniversario de su inhabilitación. / Ferran Nadeu

Es una anécdota semiolvidada de la Segunda Guerra Mundial que en plena contienda los británicos imprimieron miles de falsos sellos postales con la cara de Heinrich Himmler para, después, hacerlos llegar a Alemania con el propósito de levantar recelos, desconcierto y suspicacias en la cúpula del Tercer Reich y, sobre todo, desencadenar una impredecible reacción en la cúspide de esa cúpula, o sea, Adolf Hitler. Se supone que está mal echar mano de referencias al nazismo para abrir una crónica sobre una sesión del Parlament, y probablemente tengan razón quienes así lo sostienen, pero el recuerdo de esta anécdota hay que tomárselo a lo Lubitsch, que en 1942, en plena guerra, se atrevió a encontrarle un lado cómico a la barbarie en ‘Ser o no ser’, película sin igual en su género. La cosa es que el debate de política general ha estado precedido de una pequeña ceremonia en la que Laura Borràs le ha estampado al ‘president’ Pere Aragonès un sello con la efigie de su antecesor, Quim Torra. Ha sido ‘lubitschiano’.