La estabilidad del Ejecutivo central

ERC vigilará la ejecución del Presupuesto actual antes de negociar el del 2022

  • El Gobierno y los republicanos empiezan a esbozar el esqueleto de los presupuestos del año próximo

  • Unidas Podemos desoye a Sánchez y exige al PSOE incluir la reforma fiscal en el proyecto

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ’president’, Pere Aragonès, se dirigen a su reunión en la Moncloa el 29 de junio. / DAVID CASTRO

Los Presupuestos Generales del Estado (PGE), primeros de la reconstrucción pospandémica, parecen, a priori, encauzados. Los partidos del Gobierno (PSOE y Unidas Podemos) han empezado los contactos, aún preliminares, con el resto de partidos que dieron su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez, en enero de 2020. También con el que se presume el hueso más duro de roer para los socialistas, ERC, que, con sus 13 diputados, se erige como el ‘primus inter pares’ de esta amalgama de siglas que apuntalan la legislatura. Según señalaron voces diferentes de los republicanos, los contactos ya se han iniciado, pero todavía de modo informal. La negociación de verdad, con papeles y calculadora, aún no se ha iniciado.