Cita con las urnas

4-M, el examen de Madrid que marcará la legislatura

  • Todos los partidos arriesgan en las madrileñas de este martes, empezando por el PP, que se juega perder su bastión durante 26 años, pero también Sánchez podría ver cómo el clima se le da la vuelta si fracasa de nuevo en la región

  • La estabilidad también depende de Catalunya y del papel que juegue ERC y su estrategia a favor del diálogo

La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, visita el Centro de Procesamiento y Difusión de Datos para las elecciones del 4-M, este 3 de mayo. / EFE / COMUNIDAD DE MADRID

En un país en el que cuesta contar los años sin elecciones -el último fue 2013, y el anterior fue en 2002-, las del 4-M jugarán casi el rol de unas 'midterm' en EEUU. Unos comicios a mitad de legislatura. Solo están convocados en Madrid, pero la lectura será nacional. Inevitablemente. Porque el futuro inmediato de España se disputa en Madrid, la tercera comunidad más poblada y la más rica, tras una campaña para olvidar, dominada por la alta tensión y la bronca, la política emocional y binaria y la práctica ausencia en el debate público de las propuestas y de la rendición de cuentas de quien llamó a las urnas, Isabel Díaz Ayuso. 5.112.658 madrileños están citados este martes a votar, y de ellos depende en buena medida la ruleta del devenir de los próximos dos años. Pero no solo de ellos, porque en el otro epicentro político del país, Catalunya, cuya gobernabilidad ha sido imposible de resolver casi tres meses después de sus propias autonómicas, también se ventila la estabilidad del Ejecutivo de Pedro Sánchez.