Tensiones en las filas posconvergentes

El 'caso Cuevillas' destapa un debate pendiente en JxCat

  • Sectores del partido admiten en privado la necesidad de abordar la conveniencia de la confrontación simbólica

Jaume Alonso Cuevillas. / EUROPA PRESS / David Zorrakino

La dirección de Junts ha cerrado filas con un espeso silencio tras el terremoto por el cese contundente de Jaume Alonso-Cuevillas como miembro de la Mesa del Parlament por haber cuestionado una de las bases estratégicas de Junts: el desacato simbólico en el Parlament. El grueso del partido guarda silencio o atribuye al exabogado de Carles Puigdemont un cambio de criterio sorprendente por su trayectoria. Pero no faltan también voces que reconocen en privado su sintonía total con lo que el letrado y ahora diputado raso ha defendido en público, y que no es otra cosa que la idea de que ciertas acciones parlamentarias pueden ser contraproducentes para el independentismo por sus efectos penales o inhabilitadores.