Pactos poselectorales

Govern u oposición: el debate pendiente de la CUP

  • Poble Lliure propone formalmente a los órganos de dirección 'cupaire' que se abra a la militancia la discusión sobre la presencia del partido en el próximo Ejecutivo catalán

Los diputados de la CUP en la sala de prensa del Parlament. / Efe / Quique Garcia

La CUP cambia de chip y encara esta legislatura dispuesta a imprimir su sello en el plan de gobierno del futuro Ejecutivo catalán. La inquina de su equipo negociador en sonsacar a Esquerra una hoja de ruta que marque legislatura con medidas socioeconómicas -y policiales- del agrado anticapitalista ha sido compensada por la militancia 'cupera' que, pese a dejar constancia de sus reticencias a sostener un Govern previsiblemente formado entre ERC y Junts, dio este jueves el visto bueno a que sus nueve diputados invistan a Pere Aragonès como próximo 'president' de la Generalitat.