Vox ocupará los despachos de las buhardillas del Parlament en virtud de un acuerdo de todas las fuerzas con representación en la Cámara catalana excepto la de extrema derecha, según ha avanzado el diario 'Ara'. Es una primera acción de los partidos enmarcada en el objetivo de establecer un cordón sanitario para aislar a los de Ignacio Garriga.

Por otro lado, los cambios organizativos -obligados, también, por la llegada de Vox, que supone tener que meter ocho partidos en los espacios parlamentarios- comportan que el ganador de las elecciones del 14 de febrero, el PSC, pase a ocupar los despachos que hasta ahora utilizaba Ciutadans, aprtido ganador de los comicios anteriores. Cs compartirá ahora espacio con la CUP y En Comú Podem.

Por otra parte, ERC y Junts per Catalunya (JxCat) intercambian salas. Si hasta ahora los de Laura Borràs estaban en la planta superior, esta queda para los republicanos. JxCat baja a la inferior -donde hasta ahora estaba ERC- y compartirá el espacio con el PP.