El acto de Vox en Vic ha acabado este sábado con enfrentamientos entre antifascistas y Mossos. En el mitin, celebrado en la plaza Major, ha participado el secretario general del partido, Javier Ortega Smith, y el candidato a la Generalitat, Ignacio Garriga. Allí, los manifestantes les han tirado piedras, huevos, latas de cerveza y paquetes de harina en respuesta a las declaraciones de los líderes ultraderechistas, que los han calificado de "sucios" y "totalitarios".

Al acabar los parlamentos, la comitiva del partido ha hecho un recorrido , acompañada de simpatizantes y detractores, por las calles de la capital de Osona, desde la plaza Major y hasta la calle de Anselm Clavé cuando cruza el río Mèder. Aquí, los políticos han marchado y se han producido los enfrentamientos que han dejado al menos un herido. Diversos agentes han resultado heridos leves en los disturbios y no se han producido detenciones.

El líder del PP, Pablo Casado, ha condenado a través de twiter "rotundamente" los ataques a la caravana electoral de Vox en VIc. "La Fiscalía debe actuar contra los violentos que arremeten contra la democracia", ha escrito el popular la añadir: "Varios partidos llevamos sufriendo agresiones en Cataluña durante años con el silencio del nacionalismo".

En la misma línea, la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha reflexionado en twiter: "Mi rotunda condena a los ataques de hoy en Vic contra Vox. En Ciudadanos sabemos bien lo que es pues llevamos muchos años sufriendo la intolerancia y la sinrazón de los radicales separatistas. Atacan a todo el que no piensa como ellos porque odian la libertad y la democracia".