Franco, en la diana de la guerrilla: de la emboscada de Meirás al tiroteo en la Compostilla

Franco en un punto de mira / Faro de Vigo

“El nombre escogido para la operación (Termópilas) tiene su sentido, pues el lugar dibujado en el plano es un paso entre montes situado entre los quilómetros 23 y 24 de la carretera entre Santiago y A Coruña, en la ruta hacia el Pazo de Meirás, donde Franco pasaba un mes de vacaciones (…) Se trata de un operativo de siete (sic) guerrilleros; uno efectúa la señal desde un alto cuando ve que la caravana ya ha pasado por una curva; según el diseño, lo hace lanzando una bengala. ¿Se debe entender entonces que la acción está prevista de noche? Después de la señal, se suceden una primera explosión delante de la caravana y una segunda a continuación, en la retaguardia. Inmediatamente, fuego de ametralladoras, tres tiradores desde el frente en un alto, envueltos en vegetación, y otros tres desde otro alto. La caravana consta de seis automóviles y el fuego de las ametralladadoras va dirigido fundamentalmente al tercer vehículo”. Este es un extracto de la reciente novela de Suso de Toro, “Un señor elegante”, publicada en gallego por Edicións Xerais. La inclusión de este párrafo, y de todo el capítulo titulado “Operación Termópilas” en el libro, se debe, De Toro lo reconoce, a una casualidad. Durante el proceso de investigación de la novela, dedicada a la saga familiar gallega de los Baltar, originaria de Padrón, llegó a manos del escritor compostelano una voluptuosa documentación en papel, entre la cual, para su sorpresa, se encontró con un “mapa coloreado” en el que, todo parece indicar, se dibujó el operativo de un plan cuyo objetivo semejaba muy claro. De Toro así lo cree: “Se trataba de un plan para matar a Franco”, un plan que nunca antes había sido dado a conocer, que permanecía inédito, escondido, perdido… pero que era muy específico”. Tanto, que De Toro, tras diversas pesquisas, incluso deduce la fecha en que iba a llevarse a cabo: el 25 de julio de 1944.