DESDE MADRID

Un Govern de combate, indultos y CaixaBank

La nueva estrategia del Gobierno: indultar parcialmente a los presos después de que el TC resuelva los recursos y colaborar con el PDECat

Torra no acatará la inhabilitación y por eso convierte el Ejecutivo en una formación que hostigará a ERC y a Sánchez, sin aceptar ya la mesa de diálogo

Quim Torra y Ramon Tremosa, en presencia de Pere Aragonès, en la toma de posesión del nuevo ’conseller’ de Empresa / ACN / PAU CORTINA

La crisis catalana ha regresado a sus peores momentos. La "desinflamación" del Gobierno de coalición no ha funcionado. La mesa de diálogo pactada entre el PSOE y ERC ha saltado por los aires pese al brindis al sol de Pedro Sánchez y Gabriel Rufián supuestamente conjurados para convocarla este mes. Quim Torra se ha echado en brazos de Waterloo y prepara un nuevo desafío: anuncia que volverá a desobedecer –se supone que a la sentencia del Supremo que se dictará el mes que viene tras la vista oral el día 17 de su recurso de casación– y no acatará la firmeza de su inhabilitación. A tal fin ha remodelado su Gabinete, reforzándolo para que actúe en formación de combate tras la resolución judicial que lo descabalgará como presidente: resistir, desafiar, hostigar a los republicanos, a Sánchez y reverdecer los viejos laureles del 2017.