DIVISIÓN POR LA MONARQUÍA

La salida de Juan Carlos I pone a prueba la resistencia del Gobierno

Sánchez e Iglesias agudizan sus discrepancia mientras afirman que la coalición sobrevivirá

El PSOE considera que la debilidad electoral de Podemos impide que el Ejecutivo se rompa

Pablo Iglesias, Pedro Sánchez y Felipe VI, el pasado 18 de febrero en la Zarzuela.  / JUAN CARLOS HIDALGO / EFE

El 3 de agosto suele ser un día de sequía informativa. Al menos, política. Una visita protocolaria de un ministro aquí, una entrevista en radio a un diputado allí. Pero este 3 de agosto, lunes, fue completamente distinto. Antes de que comenzara una reunión entre la parte socialista del Gobierno y Cs, dentro de una renovada sintonía que quizá desemboque en los Presupuestos, Podemos ya estaba volcado en las críticas a sus socios en el Ejecutivo. Los morados, que no se sentían representados en ese encuentro, acusaban a Pedro Sánchez de "mirar a la derecha". Se trataba del mayor punto de fricción entre los socios en estos siete agitados meses de legislatura, pero aquello, en el fondo, era casi una anécdota comparado con lo que estaba a punto de llegar.