Casado, dos años de vaivenes y sin un proyecto claro

Altos cargos lamentan la falta de rumbo del líder del PP y la debilidad de los equipos

Varias voces culpan a García Egea de no haber sabido «coser el partido» tras las primarias

Pablo Casado, este sábado en el congreso provincial de Alicante. / ÁLEX DOMÍNGUEZ

Cuando el 18 de junio de 2018 Pablo Casado anunció que se presentaba a las primarias para suceder a Mariano Rajoy, la primera pregunta que asaltó a los periodistas fue: ¿pero quién le apoya? Aquel mediodía se acercó a la sede de Génova a llevar los avales y, entre la decena de personas que le acompañaban, solo había dos caras conocidas para el gran público: Javier Maroto, entonces vicesecretario del partido, como Casado, e Ignacio Cosidó, exdirector de la Policía. Es interesante analizar esa fotografía porque también estaban Isabel Díaz Ayuso, entonces portavoz del PP de Madrid y, ahora, presidenta de la Comunidad, y Teodoro García Egea, diputado por Murcia y, pocas semanas después, secretario general del partido. Una clave, la personal, que pesa mucho en el carácter de Casado.