“La independencia es una opción legítima y válida si se canaliza en una estrategia posibilista que no perjudique a la propia Catalunya, hay que superar la dinámica del procés y del conflicto con el Estado, que perjudica a los intereses de Catalunya y al propio objetivo de la independencia”, afirma en sus documentos de trabajo la plataforma "El país de demà", formada hace unos meses por académicos, empresarios, consultores y otros profesionales que se marca como objetivo una propuesta de futuro sobre Catalunya y que cuenta con el apoyo de los sectores más moderados del soberanismo, que han puesto este think tank como eje de una eventual oferta política de futuro a largo plazo. De entrada, según han planteado sus impulsores, su intención no es convertirse en un partido pero sí animar a que "algunos se hagan suyo" el ideario de este colectivo.

Contra la unilateralidad

"Este procés se ha de repensar, se ha de hacer con seny, perseverancia, paciencia, redefniir la estrategia, renunciar a la unilateralidad y sumar esfuerzos y que haya una amplia mayoría de la gente que la quiera y respetando las leyes en el contexto de la UE”, ha planteado uno de los impulsores, Antoni Garrell.

La plataforma, en la que han participado unas 260 personas, culminará este sábado los cuatro ejes de trabajo sobre economía, modelo social, valores y política. Y entre sus propuestas en este último ámbito destaca también la idea de "alcanzar un gran consenso en la sociedad catalana sobre cómo enfocar a corto plazo la relación con la Estado" y abrir una negociación para consensuar e implementar “las políticas e inversiones en las que el Estado puede hacer una mayor contribución a la prosperidad de Catalunya”.

Reformar la administración

Esta plataforma, formada por profesionales, pide también reformar la administración, que consideran anclada en el pasado, e implementar proximidad, transparencia, modelos 4.0 y que la reforma sea continuada en el tiempo. Garell, que ha presentado en rueda de prensa el proyecto de esta plataforma, ha confirmado que en ella han participado expolíticos y que su voluntad es la de hacer reflexiones a largo plazo para afrontar retos como el tecnológico. La reunión de Poblet del próximo sábado se plantea a puerta cerrada para finalizar la redacción de los documentos de trabajo.

El modelo de los documentos refleja un espíritu centrista. Garell ha hablado en términos de "equilibro entre administración, los mercados y la sociedad civil" y de la necesidad de generar progreso económico "para generar progreso social".

En cuanto a la política, se plantea recuperar el prestigio de las instituciones y critica que los partidos se centran en la rivalidad entre ellos en lugar de un proyecto de futuro para los ciudadanos y la búsqueda de grandes consensos.