"El miércoles pasado me comunicaron por sorpresa mi cese y hoy ya se ha hecho público". Con estas palabras comienza la carta que el excomisario jefe de los Mossos, Miquel Esquius, ha dirigido a todo el cuerpo. Esquius expone que asumió el cargo "por responsabilidad y por sentido del deber" y ahora asume con "el mismo sentido del deber" la destitución que se ha hecho pública este lunes a través de una rueda de prensa del consejero Miquel Buch y el nuevo comisario jefe, Eduard Sallent.
Esquius indica que ha procurado tomar las "mejores" decisiones "pensando en recuperar la normalidad institucional, con todos los estamentos, cuerpos y actores sociales, desde la neutralidad política y con la voluntad final de servicio a toda la ciudadanía".
Esquius, que termina la carta poniéndose a disposición del nuevo comisario jefe, explica que ha sido "un honor" representar el cuerpo durante los once meses y agradece el encargo. También agradece a los agentes del cuerpo el "compromiso" y "lealtad". "Y si ahora los máximos responsables del Departament han creído que lo mejor era mi relevo, hay que aceptarlo", añade.