REUNIÓN EXTRAORDINARIA

La CUP debatirá si se presenta a las elecciones generales

Los anticapitalistas convocan una reunión de urgencia el 10 de marzo en Barcelona para decidir si concurren al 28-A

Someterán a discusión si "intensifican su acción política" para "defender el derecho a la autodeterminación" más allá de Catalunya

El diputado de la CUP Carles Riera, en el Parlament. / JOAN CORTADELLAS

La CUP se sumirá en un debate inaudito para decidir si concurre o no a las elecciones generales del 28-A, según ha podido saber EL PERIÓDICO. Si bien el pasado martes el diputado Vidal Aragonés aseguró que seguirían con la dinámica que han llevado a cabo hasta ahora, las bases han presionado para que se discuta su concurrencia, como ya sucedió con la cita a los comicios europeos.

Los anticapitalistas nunca habían debatido sobre su papeleta en este tipo de contienda electoral y habían potenciado el abstencionismo. Ahora, por primera vez, discutirán su participación porque consideran que "el ejercicio del derecho a la autodeterminación ha acontecido el elemento fundamental de confrontación democrática, hecho que ha abocado el Estado a la inestabilidad política permanente". "Por este motivo, [la CUP] someterá a debate si tiene que intensificar su acción política directa para seguir reivindicando este derecho más allá de los Països Catalans y a través de qué estrategias", han clarificado después en un comunicado oficial.

El consejo político convocado de forma extraordinaria y urgente se celebrará el 10 de marzo a las 18 horas en la sede del partido en Barcelona. El secretariado nacional, órgano de dirección del partido, ha elaborado un documento de urgencia que no es definitivo porque está a la espera de las aportaciones de las distintas asambleas territoriales que presentarán hasta el 5 de marzo. Dos días después, harán llegar a su militancia la documentación definitiva para discutir su concurrencia al 28-A. 

Los anticapitalistas se dividen entre dos planteamientos: uno que apuesta por consensuar una candidatura con partidos afines para sentarse en el Congreso de los Diputados con un relato decidido a "tumbar el régimen" y otro que mantiene que no tienen cabida en las instituciones del Estado porque de lo contrario las "legitimarían".