LA CARRERA A LAS URNAS

Sánchez pide a PP y Cs que le apoyen los Presupuestos y dejen de "alimentar" a la ultraderecha

El líder socialista traslada el apoyo del partido a Susana Díaz y el PSOE andaluz, "espejo en el que nos miramos"

El presidente del gobierno defiende que su única coalición es ¿la mayoría social¿

Sánchez, con Díaz, en el acto de proclamación como candidata a las elecciones andaluzas. / EFE

PP y Cs son quienes han puesto de moda a Vox, según Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno dijo ayer en Sevilla que con su política de “crispación y radicalidad” y de “abandono de la moderación” son quienes “alimentan a la ultraderecha”. Es más, cuando estas formaciones han aparecido, “la derecha española no ha dicho nada”. Antes al contrario, dijo, instando al líder popular Pablo Casado a desvelar cuáles son esos “valores esenciales” que dicen compartir con Vox. “Nosotros, ninguno”.

El líder del PSOE entró ayer en campaña para las andaluzas del 2 de diciembre al acudir a la proclamación de Susana Díaz como candidata a la Junta de Andalucía, escenificando que cualquier diferencia que hubiera entre ellos queda aparcada aunque tengan visiones distintas en algunas cuestiones. Con el PSOE en La Moncloa, “todos son de Pedro”, como señalaron algunos afines al secretario general, y más aún si toca remangarse para unas elecciones, las primeras de Sánchez como presidente del Ejecutivo. Se tomaron de la mano, se dieron abrazos, y el líder socialista llegó a decir que el PSOE andaluz “es el espejo en el que nos miramos los socialistas”, situando en la región donde gobiernan desde hace 36 años las raíces de la propuesta socialdemócrata. Un cierre de filas más llamativo por cuanto la batalla interna parece librarse ahora en el PP entre partidarios de Casado y la dirección regional, que defendió públicamente a la otra candidata de las primarias, Soraya Sáenz de Santamaría.

En Sevilla, Sánchez dejó ver que la estrategia de campaña pasa por un discurso más moderado, “de la alegría” frente al “lodazal” y los “tipos cenizos que vienen de Madrid a proclamar el apocalipsis”, según lo definió Díaz, mientras PP y Cs se enzarzan en una lucha por liderar la derecha. A ese votante moderado apeló el líder socialista al pedir el apoyo de ambas formaciones a los presupuestos generales “porque no pueden hacer oposición a costa del bienestar de los españoles”. “Antes vetaban desde el Gobierno y ahora desde la oposición”, lamentó.

También la andaluza hizo un guiño a ese votante de centro, ya que aunque se presentó como el partido que ha puesto en pie políticas de izquierda “auténticas”, recordó que el PSOE andaluz ha sabido dialogar con partidos de distinto color, desde el Partido Andalucista a IU o Cs, con un proyecto transversal que lo mismo defiende los derechos de los sindicatos que negocia con los empresarios.

El presidente del Gobierno quiso deshacerse además de la idea de que se apoya en populistas e independentistas, como ayer mismo le espetó Casado desde Granada arremetiendo contra la visita de Pablo Iglesias –principal apoyo socialista en el Congreso—a Oriol Junqueras en la cárcel de Lledoners. Quienes están en prisión provisional por dar “un golpe de estado”, dijo el líder popular no pueden ser “los que manden en el futuro en un vis a vis carcelario”. Aunque no entró en el tema catalán, Sánchez insistió en que “nosotros gobernamos en coalición con la mayoría social”. Así, afirmó que frente a los que adolecen de falta de ideas y “hacen agua y eses, porque no saben dónde van”, su gobierno se mueve “con paso firme para lograr una mayoría política y social para seguir avanzando”.