La ANC, la CUP y los CDR abrazaron este viernes la propuesta de la organización juvenil Arran, vinculada a los anticapitalistas, de ocupar la plaza de Sant Jaume de Barcelona para evitar que la concentración convocada por la asociación de policías nacionales y guardias civiles Justicia Salarial Policial (Jusapol) pueda celebrarse en este lugar.
Los agentes solicitaron el permiso de manifestación para reivindicar la "equiparación salarial", aunque tienen previsto realizar un acto de reconocimiento a los que participaron en la Operación Copérnico para frenar la consulta. Parte del independentismo, ya molesto por el desalojo de la 'Acampada per la llibertat', decidió impulsar una "acampada masiva" desde cerca de las 8 horas, una vez finalizada una marcha por la despenalización del aborto, y hasta las 11.30 horas del sábado, cuando pretenden celebrar un "Holi Festival", un lanzamiento de pintura a los uniformados, emulando una popular celebración hindú que conmemora la primavera. Y es que a esa misma hora, los policías y guardias civiles se juntarán ante la Jefatura Superior de Policía en la Vía Laietana, a pocos metros de la plaza de Sant Jaume.
"Ahogaremos al fascismo con pintura", espetó la portavoz Adriana Llena, y cargó contra el Govern de la Generalitat por permitir la manifestación de Jusapol, una protesta que entiendon como una "provocación". Asimismo, volvió a pedir la dimisión del 'conseller' de Interior, Miquel Buch, a quien vistieron en un cartel con el uniforme de la Guardia Civil "por colaborar con la represión y las fuerzas de ocupación".
La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, afeó al Ejecutivo que "no acompañe sus palabras con hechos" y que, además, caiga en "contradicciones". Sobre la marcha de Jusapol, preguntó: "¿Hasta qué nivel de indignidad estamos dispuestos a soportar? Hay que defender la dignidad de nuestro pueblo contra la apología de la violencia del Estado".
Por su parte, el diputado de la CUP, Carles Riera, llamó a la "movilización permanente" y pidió que se "ocupe masivamente de forma no violenta el espacio público" para "desbordar a los partidos y las instituciones".
Desde Jusapol, criticaron el cambio de recorrido porque, a su juicio, el Departament de Interior cedió a "los chantajes y amenazas". Según Interior, la decisión se basa en un informe de la Dirección General de Administración de Seguridad que concluye que la plaza "no puede abarcar de forma segura la previsión de asistencia" de ambas manifestaciones y que "se pueden producir alteraciones del orden público con peligro para personas o bienes".