La jueza de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez-Medel, no ha perdido el tiempo desde que el pasado 27 de abril admitió a trámite la denuncia de la catedrática Ángela Figueruelo, que aparece como firmante del acta de convalidación de las notas de la expresidenta madrileña Cristina Cifuentes por el máster en Derecho Autonómico de la Universidad Rey Juan Carlos que dice haber cursado. Desde entonces rara ha sido la semana que la magistrada no ha tomado declaración a profesores que impartieron las clases o a otros alumnos que debieron coincidir con la exdirigente madrileña.
Pese a esa actividad, esta semana será clave para aclarar qué ocurrió realmente con el título que le costó el puesto a Cifuentes, porque entre este lunes y martes le tomará declaración a ella, como imputada por un delito de falsedad en documento público y otro de cohecho, y a otros 10 investigados, así como a dos testigos. Y todo ello mientras recaba documentación sobre el otro máster cuestionado, el del candidato a presidir el PP Pablo Casado, cuya condición de diputado ya ha solicitado al Congreso, paso imprescindible para poder dirigirse al Supremo, que es el único tribunal que le puede investigar por su condición de aforado.
La jueza tomará declaración este lunes al director del polémico máster, el catedrático Enrique Álvarez CondeEnrique Álvarez Conde, y a las profesoras Alicia López de los Mozos, Cecilia Rosado y Susana Galera, así como a su compañero Rodrigo Martín Jiménez. También está citada María Teresa Feito, amiga de Cifuentes y asesora del Gobierno regional que se dirigió a la universidad cuando estalló el escándalo.
Las declaraciones del martes las inaugurará la propia Cifuentes. Y después de ella comparecerán los también profesores Jesús Primitivo González, Manuel Arenilla, Elena Pérez Martín y Esther González Hernández, así como dos informáticos como testigos. Las declaraciones de Pablo Chico de la Cámara y del compañero de máster de Cifuentes A.M.H. han sido pospuestas al 1 de agosto, día en el que tendrá que volver a comparecer Álvarez Conde, en esta ocasión imputado por prevaricación o falsificación de documento en relación con el máster que Casado cursó en el curso 2008-2009.
Con todas estas declaraciones la magistrada tendrá mucho más claro cómo funcionaba el polémico máster. Muchos testigos que han comparecido ya ante ella, como el exteniente de alcalde de Madrid Pedro Calvo, han explicado que se matricularon pero no asistieron a las clases y luego fueron aprobados. La expresidenta de la Comunidad de Madrid por su parte siempre ha mantenido que cursó su titulación en Derecho Autonómico en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) y que, si había habido irregularidades, solo serían imputables al centro docente.