Cerramos este hilo directo con la crónica de la jornada: Las dimisiones de Artur Mas y Carles Mundó sacuden al independentismo.

Preguntado por la posibilidad que baraja Puigdemont de buscar la forma de ser investido telemáticamente, Mas echa balones fuera. "Durante dos años no me han oído cuestionar nada en público sobre lo que ha hecho Puigdemont", señala. Añade que ha tenido su opinión y se la ha expresado a su sustituto, pero que no ha "discrepado" públicamente. "Tampoco lo voy a hacer ahora. Son decisiones que tiene que tomar él y, tome las que tome, yo le apoyaré en la medida que pueda", añade.

Sobre la constitución del futuro Govern y la incógnita sobre el regreso o no de Puigdemont, insta a hacerle esa pregunta a su sustituto. "Yo no le daré consejos y menos públicos", afirma. 

En cuanto a su legado, afirma: "Dejo cinco victorias en convocatorias electorales, aunque solo pude gobernar dos veces".

El 'expresident' reitera que el 21-D lleva "a la primerísima línea" de nuevo al proyecto de la que fue Convergència y que se va para "ayudar" al partido en esta etapa de expansión.

E insiste también en que no debe verse "confrontación" entre el PDECat y JxCat porque fue una fórmula, acordada, dice, que se planteó para, con la base de CDC, llegar a más gente. "Esto es una fórmula de éxito", afirma. "JxCat ha de servir de acelerador para que el PDECat se transforme en aquello que queríamos", señala. 

"940.000 votantes son ya una gran base para solidificar y consolidar este proyecto. Y JxCat consiguió esos 940.000 votantes en pocas semanas", remarca. "Estoy dispuesto a hacer lo que haga falta para reforzar esto", reitera.

Mas, que afirma que algunos han malinterpretado sus palabras de este lunes, subraya que su renuncia "no es un mensaje a nadie". "Es un estilo propio de afrontar las situaciones", dice.

A la primera pregunta de la prensa, asegura que no se retira de la política. "Yo sigo vinculado a la política del país, muy implicado, muy comprometido. No me desentiendo en absoluto", subraya. Ahora afronta una nueva etapa, dice, "no tan de primerísima línea". Hace lo que cree, insiste, que más le conviene tanto al partido, que que se "refuerce", como a él, para afrontar sus citas judiciales.

Unas circunstancias que le señalan "un camino lleno de dificultades", explica. "Esto tiene consecuencias prácticas y a mí me resta margen de maniobra en el corto plazo", añade, por lo que considera que no debe aferrarse a la presidencia del partido. Se necesita al frente del partido, dice, "alguien con un margen de maniobra mayor".

El 'expresident' resume su decisión con la afirmación de que se aparta para "facilitar el proceso de implantacion del PDECat" y ante el calendario judicial que debe afrontar.

"Es una decisión firme, irrevocable, en plena conciencia. No os puedo decir que contento, pero sí aliviado", dice. "Hago honor a los principios que me han guiado", afirma. Y añade: "Primero es el país, después el partido y después la persona".

El 'expresident' asegura que cree en el PDECat y en la fórmula de JxCat y que su renuncia llega "en un momento oportuno", en el que hay que tomar decisiones claves.

La segunda razón es "el calendario judicial" que Mas tiene que "afrontar" en los próximos meses, tras ser juzgado y condenado por el 9-N, pendiente de ratificación por parte del Tribunal Supremo (TS). "Como creo que el Supremo la ratificará, yo quedaré inhabilitado para ejercer un cargo público", subraya.

"Y no solo eso. También tengo que afrontar todo el proceso del Tribunal de Cuentas", añade. "El juicio se hará en los próximos meses", subraya el 'expresident', que recuerda que, además, figura en la causa ampliada por el 1-O. "Sé que en unos días me llamarán en el Supremo para prestar declaración como investigado en la causa del 1 de octubre".

La primera razón de su renuncia es, afirma, que el del 21-D fue "un muy buen resultado" para su partido, que fue "mucho más allá" de lo que Junts per Catalunya, una fórmula electoral que ha alabado, esperaba. 

"Este buen resultado de JxCat abre una posibilidad enorme, una posibilidad de oro para que el PDECat pueda ensanchar su base", señala. Mas cree que "esta nueva etapa que se abre", esta "combinación" del PDECat y JxCat necesita "dejar espacios libres para que determinadas personas puedan encabezar este proyecto cara a un futuro".

El 'expresident' confirma que "hace meses" que tenía pensado renunciar a la presidencia del partido y que así se lo había "comentado" a Carles Puigdemont, Marta Pascal y otras personas de su confianza.

"No es una decisión precipitada", afirma, sino "meditada". "En el inicio de este curso político he querido materializar esta decisión", ha dicho, subrayando la importancia de la nueva etapa tras el 21-D.

Mas recuerda que justo hace dos años renunció a la presidencia de la Generalitat y propuso a Puigdemont como relevo. 

Mas comparece ante la prensa.

Los medios de comunicación esperan ya en la sede del PDECat el inicio de la rueda de prensa en la que Mas explicará su renuncia a la presidencia del partido.

Las mismas fuentes señalan que Mas había hablado su renuncia con la dirección de su partido el pasado verano y que quería hacer el anuncio la primera semana de noviembre, aunque finalmente se retrasó. Finalmente, lo hará este martes, tras las fiestas navideñas, el 21-D, el cese del Govern y la declaración unilateral de independencia en el Parlament.

Precisamente este lunes, el expresidente catalán expuso, en una reunión del PDECat, que las pasadas elecciones autonómicas, que ganó C's aunque las fuerzas independentistas suman una ajustada mayoría (JxCat, ERC y la CUP obtuvieron 70 diputados, con un 47,5% de votos), no dieron a los independentistas una mayoría suficiente para "imponer nada". 

Mas ha decidido renunciar a la presidencia del PDECat para afrontar con más tranquilidad la defensa de sus causas judiciales, por un lado, y, por otro, para facilitar un impulso del partido en su operación de "ensanchamiento" tras la experiencia positiva de Junts per Catalunya, que, de las tres fuerzas independentistas que concurrieron al 21-D, fue la más votada.

Así lo han indicado a Efe fuentes de la dirección del PDECat poco antes de la rueda de prensa que ofrecerá, a las seis y media, el propio expresidente de la Generalitat.

Fuentes del PDECat apuntan a Munté, actual vicepresidenta del partido, como sucesora de Mas.

La ejecutiva del partido se reúne y después se prevé que Mas encabece una rueda de prensa, convocada para una hora después en la sede de la formación, donde está previsto que explique las razones de su renuncia.

A la rueda de prensa asistirá también la vicepresidenta del PDECat, Neus Munté; la coordinadora general, Marta Pascal, y el coordinador de organización, David Bonvehí.

Fuentes del PDECat han reconocido que "todo apunta a que Mas anunciará que deja la presidencia del partido" y que lo anunciará en la rueda de prensa que ha convocado este mismo martes.

La presidencia de Artur Mas en el PDECat llega a su final ante la creciente presión judicial y tras unas elecciones autonómicas que requieren la definición de una hoja de ruta clara y compartida por toda la dirección del partido. El próximo lunes, dos días antes de la constitución del Parlament, se conocerá la sentencia del 'caso Palau''caso Palau', que podría hacer responsable a CDC del expolio del Palau de la Música.

El expresidente de la Generalitat abandonaría así definitivamente la primera línea política en un intento de proteger al PDECat del desgaste que causaría la condena para la extinta Convergència. Los responsables del Palau confesaron que CDC cobraba comisiones a través de la institución a cambio de la adjudicación de obra pública, un extremo que la formación negó en el mismo juicio.