Un grupo de presos políticos españoles de la época franquista ha reivindicado este miércoles que España es un Estado de Derecho negando la existencia de presos de conciencia y ha criticado la "campaña de desprestigio" contra España que, a su juicio, ha emprendido el 'expresident' de la Generalitat, Carles Puigdemont, y su Govern, "legalmente" cesado.
"En España no existen presos políticos, ni nadie se ve obligado a expatriarse como consecuencia de una supuesta persecución política ejercida por el Estado o por los jueces", reitera el documento de los antiguos presos, entre los que se encuentra el exmiembro de ETA Eduardo 'Teo' Uriarte, condenado a muerte por la justicia franquista en 1970 en el marco del conocido como Proceso de Burgos.
"Nuestra Constitución define a nuestra Nación como un Estado de Derecho y garantiza que nadie pueda ser perseguido por motivos ideológicos, políticos y religiosos", indica el grupo de ex presos políticos, que reiteran que en España se cumplen todas las condiciones para la expresión de cualquier ideología "moralmente legítima", y están "garantizadas las vías democráticas para la consecución de cualquier objetivo, político, económico y social compatible con la Libertad y la Justicia".
Y denuncia la "campaña de desprestigio" iniciada por los dirigentes catalanes, a los que acusa de subvertir el orden y crear un nuevo orden político en España "amparándose en las prerrogativas que les concedió el Estado democrático". Además la misiva apunta a que Puigdemont y sus 'consellers' se han servido de medios ilegales y de las arcas del Estado para sus objetivos secesionistas.
Firmado: los últimos presos o exiliados políticos
El texto ha sido firmado por Eduardo 'Teo' Uriarte, José María Zubiaga, Iñaki Viar, Rafael Simón, Luís María Igartua, Javier Elorrieta y Luís Emaldi, y en él se reivindican como los "últimos presos o exiliados políticos de un país de la Europa no comunista". Destacan que su acción se basó en negar el autoritarismo del régimen franquista y en reivindicar un sistema de libertades para España, entendiendo que su lucha buscaba objetivos semejantes a las condiciones de la Europa democrática de entonces.
"Luchamos entonces por causas distintas, pero todas ellas gozaban de libertad de expresión en la Europa democrática de aquellos años, y todas coincidían en negar el autoritarismo del régimen franquista y en reivindicar un sistema de libertades para España", asegura el documento.
Y realizan una defensa del texto constitucional de 1978, asegurando que el ordenamiento político que instauró supuso una "garantía de libertad y convivencia", y la "fórmula que ha permitido acabar con el secular enfrentamiento entre españoles".