Toni Comín califica el cartel de Endavant de "peligroso" y exige su retirada

Considera que es un "error" hacer "una alegoría de un puñetazo" porque legitima conductas violentas

El ’conseller’ de Salut, Toni Comín. / ACN

"¡Basta de humillaciones a la sanidad pública, plantémosles cara!". Este es el lema que encabeza dos carteles de Endavant Osan, una de las fuerzas integrantes de la CUP, que ha indignado al Govern porque en uno de ellos aparece una trabajadora sanitaria abofeteando al 'conseller' de Salut, Toni Comín, y en otro este recibe un puñetazo de una enfermera. Con estas imágenes, la facción 'cupaire', a la que pertenece la diputada Anna Gabriel, llama a una manifestación este jueves a las 18.00 horas ante las urgencias del Parc Taulí de Sabadell contra los recortes en la sanidad pública.

La irritación del Ejecutivo catalán la ha capiteanado el mismo 'president' Carles Puigdemont, al que han seguido la 'consellera' Neus Munté y el propio afectado, Comín. Todos han acusado a Endavant Osan de "banalizar la violencia". El 'conseller' de Salut ha calificado de "peligroso" el cartel de Endavant porque puede legitimar actitudes violentas, algo que, a su juicio, no debe de fomentar ninguna formación política. Comín ha exigido a la organización integrante de la CUP que retire el cartel, algo que los promotores se han negado a hacer tachando de "hipócrita" la reacción del Govern.

"Se banaliza la violencia. Todas las organizaciones que quieren hacer política tendrían que tener en cuenta que hay una línea muy estricta [que no se puede rebasar]: la insinuación, por indirecta que sea, de que la violencia es un instrumento legítimo para defender tus ideas", ha añadido Comín en declaraciones a RAC-1. El titular de Salut ha asegurado que se ha sentido "agredido" y ha recalcado que es un "error" justificar o legitimar un cartel que realiza "una alegoría de un puñetazo".

LA POSTURA DE LA CUP EN EL PARLAMENT

Comín ha manifestado también que el cartel del Endavant, organización a la que pertenece la diputada Anna Gabriel y que se posicionó en contra de apoyar los presupuestos en la reunión del pasado sábado, contrasta con la posición de la CUP en el Parlament, que ha apoyado las políticas que está llevando a cabo en su departamento. De hecho, la jefa del grupo parlamentario cupero, Mireia Boya, se ha desmarcado del cartel.

Pero la polémica puede girarse en contra de Junts pel Sí porque el PPC ha presentado una propuesta de resolución en el Parlament para condenar las "manifestaciones que incitan a la violencia, en general, y las dirigidas por parte de Endavant Osan contra Comín, en particular". Una iniciativa que obligará a la coalición que sostiene al Govern a posicionarse y, quizá, votar distinto de la CUP.

Comín y los pacientes en los pasillos

Por otra parte, el 'conseller' de Salut, Toni Comín, ha vuelto a insistir en que cuando en la entrevista con EL PERIÓDICO habló de que las enfermeras ponían a los pacientes en los pasillos se refería a que esto lo hacen solo cuando hay "razones objetivas de seguridad clínica, en situaciones muy puntuales y nunca por comodidad o arbitrariedad". Según ha explicado, así se lo trasladó al colectivo en la reunión del pasado viernes.